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Quebrantamiento de una Orden de Alejamiento: Consecuencias y Penas

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El quebrantamiento de una orden de alejamiento es un tema que no solo genera inquietud en quienes lo atraviesan, sino que también despierta numerosas dudas legales. Cuando un tribunal dicta una medida de protección, como una orden de alejamiento, su incumplimiento puede tener graves consecuencias legales tanto para el infractor como para la víctima. ¿Cuáles son los límites de estas medidas? ¿Qué sucede si la orden se quebranta de manera accidental? En este artículo, analizaremos en profundidad qué constituye este delito, cuáles son sus requisitos y penas, y por qué contar con un buen asesoramiento legal resulta fundamental en este tipo de situaciones.

Qué es el delito de quebrantamiento de una orden de alejamiento

El delito de quebrantamiento de una orden de alejamiento se refiere a la violación de una medida judicial que prohíbe a una persona acercarse o comunicarse con otra. Esta medida suele imponerse como parte de las sentencias o medidas cautelares en casos de violencia de género, violencia doméstica, acoso u otros delitos donde se requiere proteger la integridad física y emocional de una persona.

De acuerdo con el Código Penal Español, en su artículo 468, el quebrantamiento de condenas o medidas cautelares constituye un delito punible. Dicho artículo establece que “el que quebrantare su condena, pena o medida de seguridad impuesta conforme a la ley, será castigado con la pena de prisión de seis meses a un año.”

Esto implica que no solo el acercamiento físico constituye un quebrantamiento. Otros actos como:

  • Llamadas telefónicas.
  • Mensajes de texto o correo electrónico.
  • Intentos de contacto a través de redes sociales.
  • Comunicación a través de intermediarios.
  • Acudir a lugares que la orden judicial prohíbe (como el domicilio o lugar de trabajo de la víctima).

El objetivo principal de una orden de alejamiento es garantizar la seguridad y protección de la víctima, evitando cualquier tipo de contacto que pueda resultar intimidatorio, violento o perturbador. Este delito no solo afecta a la relación entre las partes, sino que también implica una violación del principio de autoridad judicial, ya que se desobedece una orden emitida por un tribunal.

Requisitos para el quebrantamiento de una orden de alejamiento

Para que se configure el delito de quebrantamiento de una orden de alejamiento, deben concurrir ciertos requisitos legales. Estos requisitos han sido desarrollados a lo largo del tiempo por la legislación española y la jurisprudencia, con el fin de delimitar cuándo estamos ante un delito:

  1. Existencia de una orden judicial vigente
    La orden de alejamiento debe haber sido dictada por un juez o tribunal competente. La misma debe estar en vigor en el momento del presunto quebrantamiento. Si la orden ha caducado o no ha sido comunicada formalmente al infractor, no existe delito.

  2. Notificación expresa al infractor
    Es imprescindible que el infractor haya sido notificado de manera formal sobre la existencia de la orden de alejamiento. La ley exige que la persona afectada conozca claramente las prohibiciones impuestas, los límites geográficos y las acciones que le están vedadas.

  3. Realización de un acto contrario a la medida
    El quebrantamiento puede producirse de diferentes formas:

    • Acercamiento físico, al acudir a los lugares prohibidos.
    • Contacto directo por cualquier medio (teléfono, internet, redes sociales).
    • Aparición intencionada en eventos donde esté la víctima.
  4. Intencionalidad del acto
    Aunque la ley no exige que el quebrantamiento sea intencionado en todos los casos, la intencionalidad puede ser clave para agravar o atenuar la pena. Incluso un contacto accidental puede ser considerado delito si el juez determina que existió alguna negligencia o falta de cuidado.

  5. Perjuicio o riesgo para la víctima
    El quebrantamiento de una orden de alejamiento se evalúa, en parte, por el riesgo generado para la víctima. El tribunal analizará si la acción del infractor ha supuesto un peligro físico o emocional para la persona protegida.

La combinación de estos requisitos garantiza que solo aquellas conductas que realmente violen la medida judicial y pongan en riesgo a la víctima sean sancionadas, al tiempo que se respetan los derechos de todas las partes involucradas.

Penas previstas para el quebrantamiento de una orden de alejamiento

El quebrantamiento de una orden de alejamiento es un delito castigado con penas significativas debido a su gravedad y a las implicaciones que tiene para la víctima y el sistema judicial. El artículo 468 del Código Penal establece las siguientes sanciones:

  1. Pena de prisión
    La pena principal por el quebrantamiento de una orden de alejamiento es de seis meses a un año de prisión. Esta sanción suele aplicarse en casos donde el quebrantamiento ha sido intencionado y se ha producido un riesgo evidente para la víctima.

  2. Multa económica
    En lugar de la pena de prisión, el tribunal puede optar por imponer una multa económica, cuyo importe se determina en función de la gravedad del delito y de la situación económica del infractor. Esta opción suele aplicarse en casos de menor gravedad o cuando el infractor no es reincidente.

  3. Penas agravadas en casos de violencia de género o reincidencia
    Si el quebrantamiento ocurre en el marco de un delito de violencia de género, o si el infractor es reincidente, las penas pueden incrementarse. La ley es especialmente rigurosa en estos casos, ya que la reincidencia demuestra una falta de respeto a la autoridad judicial y un riesgo evidente para la víctima.

  4. Medidas de control adicionales
    Además de las penas principales, el tribunal puede imponer medidas complementarias, tales como:

    • Uso de dispositivos electrónicos de control (brazaletes GPS) para asegurar el cumplimiento de la orden.
    • Prolongación de la duración de la orden de alejamiento.
    • Programas de rehabilitación para el infractor.

Importancia del asesoramiento legal en casos de quebrantamiento de una orden de alejamiento

Tanto si eres víctima como si has sido acusado de quebrantar una orden de alejamiento, contar con un asesoramiento legal especializado es fundamental. Este tipo de situaciones pueden ser muy complejas, tanto emocional como jurídicamente, y requieren de la intervención de un profesional que asegure el respeto a los derechos de todas las partes.

Ventajas del asesoramiento legal para la víctima

  • Garantizar el cumplimiento efectivo de la orden.
  • Solicitar medidas adicionales de protección si la seguridad de la víctima está en riesgo.
  • Actuar con rapidez ante un quebrantamiento.

Ventajas del asesoramiento legal para el infractor

  • Defender sus derechos y verificar si la orden de alejamiento se notificó correctamente.
  • Presentar pruebas o circunstancias atenuantes.
  • Evitar penas desproporcionadas si el quebrantamiento fue accidental.

Conclusión

El quebrantamiento de una orden de alejamiento es un delito con graves implicaciones legales y emocionales. Su regulación en el Código Penal español busca proteger a las víctimas y sancionar a quienes infringen las medidas judiciales. Si deseas obtener más información sobre temas relacionados con el derecho penal y la protección de derechos, te invitamos a explorar otros artículos de nuestro blog. Estar informado es el primer paso para actuar correctamente ante cualquier situación legal.

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